
Los metales no se encuentran en la naturaleza en estado puro, sino combinados con otros elementos o mezclados con materiales inertes conocidos como ganga. Para poder extraerlos, es necesario realizar una serie de operaciones previas que preparen y concentren el mineral, aumentando su riqueza metálica y eliminando las impurezas.
Esta etapa, denominada preparación y concentración del mineral, constituye el punto de partida de la metalurgia extractiva y tiene una gran importancia desde el punto de vista ambiental, higiénico y de seguridad laboral, ya que implica manipulación intensiva de sólidos, generación de polvo y, en algunos casos, exposición a reactivos químicos.
¿Qué es la preparación y concentración del mineral?
La preparación del mineral agrupa las operaciones mecánicas y físico-químicas que permiten separar el material útil del estéril.
Estas etapas pueden incluir:
- Trituración y molienda: reducción del tamaño del mineral mediante trituradoras, molinos y tamices.
- Clasificación: separación granulométrica del material según tamaño o densidad.
- Concentración gravimétrica: aprovechamiento de la diferencia de densidades entre minerales.
- Separación magnética: separación de partículas ferromagnéticas.
- Flotación: proceso fisicoquímico donde se emplean reactivos (colectores, espumantes, modificadores) para separar los minerales de interés.
- Calcinación o tostación previa: calentamiento controlado para eliminar humedad, carbonatos o azufres.
Cada una de estas operaciones implica exposición potencial a agentes químicos y polvo mineral respirable, por lo que la evaluación de riesgos es obligatoria conforme al Real Decreto 374/2001 sobre agentes químicos.
Riesgos químicos más relevantes
| Fuente de riesgo | Sustancia o agente | Efectos principales |
|---|---|---|
| Polvo mineral fino | Sílice cristalina (SiO₂), óxidos metálicos, carbonatos, sulfuros | Neumoconiosis, silicosis, irritación respiratoria, conjuntival y dérmica |
| Reactivos de flotación | Xantatos, sulfuros, espumantes, modificadores de pH (soda cáustica, cal, ácidos) | Toxicidad dérmica y por inhalación, corrosividad, sensibilización cutánea |
| Emisiones de calcinación/tostación | SO₂, CO₂, CO, óxidos de metales pesados | Irritación respiratoria, riesgo sistémico y ambiental |
| Ruido y vibraciones asociadas | No químicos, pero coadyuvantes del riesgo (interacción polvo + ruido) | Fatiga, cefaleas, estrés térmico |
Evaluación de la exposición
La evaluación higiénica debe considerar tanto el polvo total como el polvo respirable y los contaminantes gaseosos generados.
Métodos recomendados:
- Muestreo personal con bombas de aspiración y filtros gravimétricos (UNE-EN 689:2019).
- Medición de concentración de sílice cristalina respirable, comparando con el valor límite de exposición profesional (INSST, 2024):
- VLA-ED (8 h): 0,05 mg/m³.
- Control de gases en calcinación mediante analizadores portátiles (SO₂, CO).
- Medición de pH y concentración de reactivos líquidos en sistemas de flotación.
Frecuencia: al menos una vez al año o tras modificaciones de proceso.
Evaluación del riesgo
| Agente | Nivel de riesgo | Factores agravantes |
|---|---|---|
| Polvo de sílice | Alto | Trabajo en seco, falta de aspiración, limpieza con aire comprimido |
| Reactivos de flotación | Medio-alto | Manipulación sin EPI o en zonas cerradas |
| Gases de calcinación | Alto | Fallos en ventilación o control térmico |
| Humedad / condensación | Medio | Incremento de corrosión y contacto dérmico con sustancias |
La exposición combinada (polvo + gases + reactivos) puede aumentar el riesgo total, especialmente en procesos sin confinamiento o con deficiente ventilación.
Medidas preventivas y correctoras
Medidas técnicas:
- Sistemas de ventilación localizada en puntos de emisión (trituradoras, tolvas, molinos, celdas de flotación).
- Encapsulamiento de molinos y cintas transportadoras.
- Uso de extracción por aspiración con filtros HEPA o ciclones.
- Automatización de la dosificación de reactivos.
- Control de temperatura y gases en hornos de calcinación.
Medidas organizativas:
- Protocolos de limpieza en húmedo o aspiración industrial (nunca aire comprimido).
- Mantenimiento preventivo de filtros y sistemas de ventilación.
- Formación específica en manipulación de reactivos y lectura de fichas de datos de seguridad (FDS).
Equipos de protección individual (EPI):
- Mascarilla FFP3 o con filtro P3 + ABEK (según exposición).
- Guantes de nitrilo/neopreno.
- Gafas cerradas o pantalla facial.
- Ropa de trabajo exclusiva y lavable in situ.
Tabla resumen: procesos, contaminantes, riesgos y medidas preventivas clave
| Proceso | Contaminante principal | Riesgo para la salud | Medidas preventivas y correctoras clave |
|---|---|---|---|
| Trituración y molienda | Polvo de sílice cristalina, óxidos metálicos, carbonatos | Silicosis, irritación ocular y respiratoria, fatiga por exposición continua | – Encapsular molinos y cintas transportadoras. – Ventilación localizada y extracción en tolvas. – Limpieza húmeda y aspiradores industriales (no aire comprimido). – Uso de mascarilla FFP3, gafas y ropa exclusiva. |
| Clasificación y cribado | Polvo mineral fino suspendido | Irritación respiratoria y conjuntival | – Instalación de sistemas de aspiración y filtros HEPA. – Barreras físicas para evitar dispersión. – Supervisión continua de la concentración de polvo. |
| Separación gravimétrica o magnética | Polvo mineral, partículas metálicas, vapores de aceite hidráulico | Irritación respiratoria y dérmica leve, exposición combinada polvo/ruido | – Ventilación general adecuada. – Mantenimiento de sistemas hidráulicos para evitar fugas. – Limpieza periódica del área. |
| Flotación | Xantatos, sulfuros, espumantes, modificadores de pH (cal, sosa cáustica, ácidos) | Irritación dérmica, corrosividad, toxicidad por inhalación | – Automatización de la dosificación de reactivos. – Cabinas cerradas o extracción localizada. – Control del pH y sustitución por productos biodegradables. – EPI: guantes de nitrilo/neopreno, mascarilla ABEK-P3. |
| Calcinación o tostación | SO₂, CO₂, CO, óxidos metálicos, gases calientes | Irritación severa, riesgo de intoxicación, efectos sistémicos | – Control térmico en hornos. – Detectores de gases y alarmas visuales/acústicas. – Filtros de mangas o depuración de gases. – EPI: mascarilla ABEK-P3 y ropa ignífuga. |
📘 Interpretación de la tabla
Esta tabla sintetiza los principales escenarios de exposición química durante la preparación y concentración del mineral.
Los riesgos más críticos se asocian a:
- Sílice cristalina respirable en operaciones mecánicas (trituración, molienda).
- Reactivos cáusticos y sulfurados en flotación.
- Emisiones gaseosas en calcinación y tostación.
Aplicar las medidas propuestas —combinando control técnico, organizativo y protección individual— garantiza una reducción significativa de la ex
Normativa aplicable
📘 Normas generales y específicas:
- Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales.
- Real Decreto 374/2001, sobre agentes químicos.
- Real Decreto 665/1997, agentes cancerígenos (sílice cristalina respirable).
- INSST (2024): Límites de exposición profesional (VLA).
- Reglamento REACH (CE) nº 1907/2006, registro y evaluación de sustancias químicas.
- Reglamento CLP (CE) nº 1272/2008, clasificación y etiquetado.
- UNE-EN 689:2019, evaluación de la exposición por inhalación a agentes químicos.
Conclusión
La preparación y concentración del mineral es una fase crítica de la metalurgia extractiva, donde el riesgo químico se combina con factores físicos (ruido, vibración, calor, polvo).
La inhalación de sílice cristalina es uno de los peligros más graves y de efectos acumulativos, junto con la exposición a reactivos químicos en flotación.
Aplicar una buena jerarquía de control (STOP: Sustitución, Técnicas, Organizativas, Protección personal), junto con una evaluación higiénica rigurosa, garantiza la seguridad de los trabajadores y el cumplimiento de la normativa vigente.
❓Preguntas frecuentes
⚠️ Aviso importante
La información contenida en este artículo tiene carácter divulgativo y orientativo. No sustituye en ningún caso a una evaluación oficial de riesgos químicos, la cual debe ser realizada por un Servicio de Prevención de Riesgos Laborales acreditado, conforme a la legislación vigente (Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales y RD 374/2001 sobre agentes químicos).
Cada empresa o instalación minera o metalúrgica es responsable de aplicar las medidas preventivas adecuadas, realizar mediciones higiénicas periódicas y garantizar el cumplimiento de los valores límite de exposición profesional publicados por el INSST (2025), así como de las disposiciones establecidas en el Reglamento REACH y el Reglamento CLP.
