
El acabado superficial constituye la etapa final del proceso industrial de la madera. Aquí se otorgan al producto sus propiedades estéticas, de protección y durabilidad, mediante pinturas, barnices, lacas y selladores aplicados por pulverización, inmersión o brocha.
Es una fase que combina alta precisión técnica con el uso intensivo de productos químicos volátiles y potencialmente peligrosos, como disolventes orgánicos, isocianatos, pigmentos metálicos y catalizadores.
Por ello, los riesgos para la salud y la seguridad del trabajador deben controlarse de manera rigurosa mediante ventilación localizada, cabinas presurizadas y equipos de protección adecuados.
🔹 Principales operaciones y contaminantes
Preparación de superficies
Antes del pintado o barnizado, las piezas pasan por lijado y limpieza, generando polvo fino de madera y restos de barnices antiguos.

Contaminantes:
- Polvo respirable de madera.
- Residuos de disolventes o catalizadores del acabado anterior.
Riesgos:
- Irritación respiratoria y cutánea.
- Potencial carcinogénico en maderas duras.
Medidas preventivas:
- Extracción localizada en lijadoras y cabinas de aspiración.
- Limpieza mediante aspiración industrial.
- Mascarillas FFP3 y gafas cerradas.
Pintado y barnizado
La aplicación de pinturas y barnices genera nieblas finas y vapores orgánicos con compuestos tóxicos o sensibilizantes.
Dependiendo del tipo de producto (nitrocelulósico, poliuretano, acrílico o base agua), varían los contaminantes principales.

Contaminantes más comunes:
- Disolventes orgánicos volátiles (COV): tolueno, xileno, acetato de etilo, MEK.
- Isocianatos: en lacas y barnices de poliuretano.
- Pigmentos metálicos: plomo, cromo, zinc, níquel, aluminio.
- Resinas acrílicas, epoxi y catalizadores peróxidos.
Riesgos:
- Inhalación de vapores → cefaleas, vértigos, somnolencia, daño hepático.
- Sensibilización respiratoria por isocianatos.
- Dermatitis o irritación ocular.
- Riesgo de incendio o explosión.
Medidas preventivas:
- Cabinas de pintado o barnizado presurizadas con extracción forzada.
- Sustituir productos con disolventes por sistemas base agua o UV-curables.
- Uso de pistolas HVLP que minimizan la niebla de pulverización.
- Mascarilla A2-P3, guantes de nitrilo, gafas herméticas y ropa antiestática.
Secado y curado
Durante el secado al aire o en horno, se liberan vapores residuales de disolventes y compuestos intermedios que pueden acumularse en el ambiente.

Contaminantes:
- COV residuales.
- Formaldehído y acetaldehído en algunos sistemas catalíticos.
Riesgos:
- Inhalación prolongada → somnolencia, fatiga, irritación.
- Acumulación de vapores inflamables → riesgo de explosión.
Medidas preventivas:
- Ventilación forzada con renovación constante del aire.
- Control de temperatura y concentración de vapores.
- Detectores de COV e instalación eléctrica antideflagrante.
📏 Tabla resumen de contaminantes y medidas clave
| Etapa del proceso | Contaminantes principales | Riesgos | Medidas preventivas |
|---|---|---|---|
| Lijado y limpieza | Polvo de madera | Irritación, cáncer nasal | Extracción localizada, mascarillas FFP3 |
| Pintado/barnizado | COV, isocianatos, pigmentos metálicos | Intoxicación, sensibilización | Cabinas presurizadas, filtros A2-P3, guantes químicos |
| Secado/curado | Vapores residuales, formaldehído | Fatiga, explosión | Ventilación forzada, detectores de gases |
⚖️ Normativa aplicable
- Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales
- Real Decreto 374/2001 – Agentes químicos
- Real Decreto 665/1997 – Agentes cancerígenos
- Reglamento REACH (CE) 1907/2006
- Reglamento CLP (CE) 1272/2008
- INSST – Límites de exposición profesional 2025
❓ Preguntas frecuentes (FAQ)
⚠️ Aviso importante
La información de este artículo tiene carácter divulgativo y orientativo. No sustituye una evaluación oficial de riesgos químicos, que debe ser realizada por un Servicio de Prevención de Riesgos Laborales acreditado.
Cada empresa del sector madera debe evaluar la exposición a disolventes, isocianatos y nieblas de pintura conforme al INSST y a los Reglamentos REACH y CLP.
🧾 Conclusión
El acabado superficial de la madera —mediante pintado, barnizado o lacado— combina la precisión artesanal con procesos de alto riesgo químico. La exposición a vapores de disolventes, isocianatos y pigmentos metálicos puede causar intoxicaciones graves y sensibilización crónica si no se aplican medidas adecuadas.
La clave está en controlar la emisión de contaminantes, sustituir sustancias peligrosas por productos de menor toxicidad y mantener una ventilación eficaz en cada fase del proceso.
Solo una gestión preventiva rigurosa garantiza un equilibrio entre calidad estética del acabado y seguridad laboral en la industria maderera moderna.
